Hay una verdad que resuena en la vida cotidiana y que, lamentablemente, también se aplica a la política y a la economía: el hilo siempre se corta por lo más delgado. Esta frase, tan simple y certera, describe con precisión lo que está ocurriendo en nuestro país con gobierno que, con el pretexto de la libertad y la modernización, ha emprendido un ajuste brutal que, lejos de afectar a la “casta” como prometió, sigue recayendo sobre las clases más vulnerables.
El ajuste no cesa. Por el contrario, se profundiza día a día, y quienes lo pagan son siempre los que menos tienen y sostienen al país con su esfuerzo diario. El gobierno ha demostrado una vez más que su idea de “libertad” no es más que una excusa para avanzar sobre los derechos de los trabajadores y trabajadoras. La tan cacareada “reforma laboral”, lejos de traer beneficios, abre las puertas a un escenario de despidos masivos con la flexibilidad que los empresarios deseen, sin importar el tamaño de la empresa.
“Van a poder diseñar el esquema (de despidos) que quieran, con la flexibilidad que quieran, a nivel empresa grande, mediana o chica”, dicen los funcionarios pero detrás de estas palabras se esconde una realidad preocupante: la libertad de despedir a quienes han construido y sostienen la economía, sin reparo en las consecuencias sociales de estas decisiones.
El gobierno que prometió terminar con la casta, está demostrando que su verdadero objetivo es desmantelar las conquistas laborales y sociales que tanto nos han costado. No es la casta la que paga este ajuste, son las familias argentinas que ven cómo sus salarios se congelan, cómo sus derechos se desvanecen y cómo la esperanza de un futuro mejor se aleja cada vez más.
Desde SUTERH, no podemos quedarnos callados ante esta embestida. No permitiremos que el hilo se siga cortando por lo más delgado ni que este ajuste siga avanzando sobre los logros que con tanto esfuerzo hemos conseguido. Defenderemos los salarios, los derechos y, sobre todo, el futuro de cada trabajador y trabajadora de edificios en Argentina.
Este ajuste no termina aquí. Sabemos que seguirán atacando más derechos, seguirán intentando despojarnos de lo que hemos construido juntos. Pero que quede claro: desde SUTERH, bajo nuestra conducción, no cesaremos en nuestro compromiso de proteger y mejorar las condiciones de vida de nuestros afiliados. La lucha continúa, y con ella, nuestro compromiso inquebrantable con cada trabajador y trabajadora de nuestro país.