Edificios seguros. Encargados y encargadas protegidos

Los protocolos que contemplan las normativas de seguridad e higiene no son una novedad en las propiedades horizontales. En el año 2013 se sancionó la Ley N°4803, por medio de la cual se establecieron los requisitos y disposiciones para la seguridad e integridad física de propietarios/as, habitantes, ocupantes y personas que se desempeñen en edificios de propiedad horizontal. 

Sin embargo, desde marzo del año pasado, nos vimos en la necesidad de ajustar muchas de las conductas que teníamos ya incorporadas. La imprevista aparición del COVID-19 implicó la readecuación de hábitos que teníamos internalizados y la adición de algunos nuevos para proteger la salud de nuestros trabajadores y trabajadoras, así como también el bienestar de los vecinos y vecinas.

La primera decisión que se tomó, en 2020, fue otorgar a los encargados y encargadas el estatus de trabajadores/as esenciales. Asimismo, aquellos/as que forman parte de los denominados “grupos de riesgo” fueron exceptuados de desempeñar sus tareas laborales. Los empleadores y empleadoras se vieron en la obligación de proveer todos los elementos adecuados para la prevención, protección, limpieza, cuidado y seguridad del personal de edificios.

Se reglamentó el protocolo para la utilización de los espacios comunes, teniendo siempre como prioritario el cumplimiento del distanciamiento social, que resguarde el estado general de quienes habitan las instalaciones. La Cámara Argentina de la Propiedad Horizontal y Actividades Immobiliarias (CAPHyAI), en un documento de junio del año pasado, explicitó cuáles son los pasos a seguir ante la aparición de un caso sospechoso de COVID-19, enfatizando en la importancia de manejar la situación con tranquilidad.

Desde SUTERH, siempre entendimos que la prioridad es proteger la salud de nuestros trabajadores y trabajadoras. Por eso, actuamos rápidamente en consecuencia, poniéndonos a su entera disposición. El acompañamiento resulta crucial en circunstancias cambiantes, donde la incertidumbre impera. Deben saber que no están solos/as: hay un sindicato responsable y presente, que los y las cuida.